Futuros
Un futuro no es más que un contrato de compraventa a plazo de un determinado producto. La diferencia con un contrato de compraventa normal es que en el contrato de futuros la fecha de transacción , el activo subyacente y el precio quedan pactados en el momento de la formalización del contrato de futuro.
Así, por ejemplo en agricultura se utilizan para que tanto el agricultor como el comprador de producto (maíz, por ejemplo), tengan asegurado un precio para el día de la cosecha. Como garantía de este acuerdo el comprador entrega un dinero a cuenta. Llegado el día fijado para la entrega, si el precio del producto en el mercado es superior al establecido en el acuerdo, el comprador saldrá beneficiado, ya que pagará el maíz por debajo del precio de mercado. Por le contrario, si el precio de mercado es inferior el beneficiado será el agricultor, que habrá vendido el maíz por encima del precio de mercado.
Opciones.
El contrato de opciones es un contrato a plazo entre dos partes que garantiza el derecho a comprar (call) o vender (put) una cantidad determinada de un activo financiero (subyacente) a un precio determinado en una fecha preestablecida o vencimiento, a cambio de pagar una prima. Dicha prima es la que da derecho a ejercitar la opción en el futuro: llegado el momento el comprador de la opción decidirá si le interesa ejercitar la opción para comprar o vender el activo subyacente. Por tanto, ejercitar la opción es un derecho para el poseedor pero no una obligación. Porá elegir entre:
1. Ejercer la opción a su vencimiento: comprar o vender el activo subyacente al precio prefijado.
2. Dejarla expirar: se tiene derecho a no ejercitar la opción contratada si llegada la fecha vencimiento la operación no resulta benefiosa para el poseedor y, en este caso, lo único que se pierde es el precio que se pagó en su momento por la opción (prima).
3. Vender la opción antes de su vencimiento: cancelar la posición, con lo que se convierten en un instrumento especulativo.
Para operar con futuros no hay que hacer ningún pago inicial, pero diariamente se van liquidando las diferencias entre el precio del futuro y el precio del subyacente. El riesgo de pérdida o ganancia es ilimitado, estando referenciado a la variación del precio.
Para operar con opciones hay que pagar inicialmente el precio de la prima de dicha opción. La liquidación se realiza el vencimiento. La posibilidad de ganancia es ilimitada y la de pérdida está limitada al importe pagado por la prima, sin tener que incurrir en pérdidas adicionales.